25 jun 2009

Apelo / Soneto da Separação

Vinicius de Moraes



Ruego

Ah, amor mío no te vayas
Mira la vida como llora
Mira qué triste esta canción.
No, te pido, no te ausentes
Pues el dolor que ahora sientes
Sólo se olvida en el perdón.
Ah, amada mía, perdóname
Pues aunque aún te duela
La tristeza que causé
Te suplico no destruyas
Tantas cosas que son tuyas
Por un mal que ya pagué.

Ah, amada mía, si supieras
De la tristeza que hay en las oraciones
Que llorando te rezo yo
Si supieras por un momento
Todo el arrepentimiento
Como todo se entristeció
Si supieras qué triste es
Darme cuenta de que partiste
Sin siquiera decir adiós

Ah, amor mío, tú volverías
Y de nuevo caerías
A llorar en mis brazos




Soneto de la Separación


De repente de la risa se hizo el llanto
Silencioso y blanco como la bruma
Y de las bocas unidas se hizo la espuma
Y de las manos abiertas se hizo el espanto.
De repente de la calma se hizo el viento
Que de los ojos deshizo la última llama
Y de la pasión se hizo el presentimiento
Y del momento inmóvil se hizo el drama
De repente, no más que de repente
Se hizo triste lo que se hizo amante
Y de solitario lo que se hizo contento
Se hizo del amigo próximo el distante
Se hizo de la vida una aventura errante
De repente… no más que de repente.




21 jun 2009

Futebol de Rua

FÚTBOL DE CALLE
Luiz Fernando Veríssimo


La picadita es el fútbol de campito, de terreno baldío. Pero existe un tipo de fútbol aún más rudimental que la picada. Es el fútbol de calle. Cerca del fútbol de calle cualquier picada es un lujo y cualquier terreno baldío, el Maracanã en juego nocturno. Si eres hombre, brasilero y criado en ciudad, sabes de qué estoy hablando. Fútbol de calle es tan humilde que llama la picada de “señora”.
No sé si alguien, algún día, de joda o por nostalgia, puso en un papel las reglas del fútbol de calle. Ellas serían más o menos así:

DE LA PELOTA – La pelota puede ser cualquier cosa remotamente esférica. Incluso una pelota de fútbol puede servir. Ante la desesperación, se usa cualquier cosa que ruede, como una piedra, una lata vacía o la cartuchera del hermano menor, que saldrá corriendo a quejarse en casa. En el caso de usar una piedra, lata u otro objeto contundente, se recomienda jugar con zapatos. Se preferencia los nuevos, del colegio. Quien juega descalzo debe cuidar de patear siempre con la uña del dedo gordo que de hecho estaba necesitando un corte. También es permitido el uso de frutas o legumbres en vez de pelota, recomendándose, en este caso la naranja, la manzana, el zapallito y la pera. Se desaconseja el uso de tomates, sandías y claro, de huevos. El ananá puede ser utilizado, pero entonces nadie querrá ser arquero.

DE LOS ARCOS – Los arcos pueden ser hechos con, literalmente, lo que tengan a mano. Ladrillos, adoquines, camisas amontonadas, los libros de la escuela, el estuche del hermano menor, y hasta el hermano menor, a pesar de sus protestas. Cuando el juego es importante, se recomienda el uso de basureros. Llenos para aguantar el impacto. La distancia reglamentar entre un arco y el otro dependerá de discusión previa entre los jugadores. A veces esa discusión demora tanto que cuando la distancia es estipulada ya es la hora de ir a cenar. Basurero volteado equivale a medio gol.

DEL CAMPO – El campo podrá ser sólo hasta el cordón de la vereda, vereda y calle, calle y vereda del otro lado y – en los clásicos – la cuadra entera. Lo más común es jugar sólo en el medio de la calle.

DE LA DURACIÓN DEL JUEGO – Hasta que la madre los llame o hasta que oscurezca, lo que venga primero. En los juegos nocturnos, hasta que alguien del vecindario llame a la policía.

DE LA FORMACIÓN DE LOS EQUIPOS – El número de jugadores en cada equipo varía, de uno a 70 en cada equipo. Algunas convenciones deben ser respetadas. El que juega mal va al arco. Cojo juega de puntero, izquierda o derecha dependiendo de qué pierna le falte. De lentes son armadores para evitar los choques. Gordo es defensa.

DEL JUEZ – No hay juez

DE LAS INTERRUPCIONES – En el fútbol de calle, el partido sólo puede ser paralizado en una de estas eventualidades:

a) Si la pelota se va bajo un auto estacionado y nadie consigue sacarla. Mandar el hermano menor…

b) Si la pelota entra por una ventana. Em este caso, los jugadores deben esperar no más de 10 minutos por la devolución voluntaria de la pelota. Si esto no ocurre, los jugadores deben designar voluntarios para golpear la puerta de la casa o departamento y solicitar la devolución, primero de buenas maneras y después con amenazas de depredación. Si el departamento o casa es de militar retirado con perro, se debe providenciar otra pelota. Si la ventana por la que entra la pelota está cerrada en la ocasión, los dos equipos deben reunirse rápidamente para deliberar qué hacer… a unas cuantas cuadras de distancia.

c) Cuando pasa por la vereda:
- Personas ancianas o con defectos físicos.
- Señoras embarazadas o con niños en brazos.
- Aquél minón del 701 que nunca usa corpiño.
Si el juego está empatando 20 a 20 y casi en el final, esta regla puede ser ignorada y si alguien está en el camino del equipo atacante, mala suerte. Nadie les dijo que invadieran el campo…

d) Cuando pasan vehículos pesados por la calle. De ómnibus hacia arriba. Bicicletas y Volkswagen, por ejemplo, pueden ser pateados junto a la pelota y si entran en el arco, es gol.

DE LAS SUBSTITUCIONES – Sólo se permiten sustituciones:

a) En el caso de que un jugador sea llevado por la oreja a su casa para hacer las tareas.

b) En caso de atropellamiento vehicular.

DEL INTERVALO PARA DESCANSO – Estás de broma.

DE LA TÁCTICA – Se juega al fútbol de calle más o menos como al fútbol de verdad (que así es como se llama a la picada en la calle), pero con algunas importantes variaciones. El arquero sólo es intocable dentro de su casa, para donde huyó gritando por ayuda. Es permitido entrar en el área adversaria haciendo paredes con una Combi. Si la pelota da vuelta a la esquina, es córner.

DE LAS PENALIDADES – La única falta prevista en las reglas del fútbol de calle es tirar un adversario dentro de la alcantarilla. Es considerado una actitud antideportiva y sancionada con un tiro indirecto.

DE LA JUSTICIA DEPORTIVA – Los casos de litigio se resuelven a trompadas.


Cuentos de Eva Luna

Contos de Eva Luna
Isabel Allende


Despias a faixa da cintura, arrancavas as sandálias, atiravas num canto tua ampla saia, de algodão, eu acho, e soltavas o nó que retinha teus cabelos num rabo-de-cavalo. Tinhas a pele arrepiada e rias. Estávamos tão próximos que não podíamos nos ver, ambos absortos nesse rito urgente, envoltos no calor e no odor do que fazíamos juntos. Abria passagem por teus caminhos, minhas mãos na tua cintura encabritada e as tuas impacientes. Deslizavas-te, me percorrias, me trepavas, me envolvias com tuas pernas invencíveis, me dizias mil vezes, vem, com teus lábios sobre os meus. No instante final, tínhamos um vislumbre de completa solidão, cada um perdido em seu queimante abismo, mas logo ressuscitávamos desde o outro lado do fogo para descobrir-nos abraçados na desordem dos travesseiros, sob o mosquiteiro branco. Eu afastava teus cabelos para olhar-te nos olhos. Às vezes te sentavas ao meu lado, com as pernas recolhidas e teu xale de seda sobre um ombro, no silêncio da noite que acabava de começar. Assim me lembro de ti, em calma.
Tu pensas em palavras, para ti a linguagem é um fio inesgotável que teces como se a vida se fizesse ao contá-la. Eu penso em imagens congeladas em uma fotografia. No entanto, esta não está impressa numa placa, parece desenhada a pluma, é uma lembrança minuciosa e perfeita, de volumes suaves e cores cálidas, renascentista, como uma intenção captada sobre um papel granulado ou uma tela. É um momento profético, é toda a nossa existência, tudo o vivido e o que resta por viver, todas as épocas simultâneas, sem principio nem fim. Desde certa distância, eu vejo estes desenhos, onde também estou eu. Sou espectador e protagonista. Estou na penumbra, velado pela bruma de um cortinado translúcido. Sei que sou eu, mas eu sou também este que observa desde fora. Conheço o que sente o homem pintado sobre essa cama desarrumada, num quarto de vigas escuras e tetos de catedral, onde a cena aparece o fragmento de uma cerimônia antiga. Estou aí contigo e também aqui, sozinho, em outro tempo da consciência. No quadro, o casal descansa depois de fazer amor, a pele de ambos brilha úmida. O homem tem os olhos fechados, uma mão sobre seu peito e a outra sobre a coxa dela, em íntima cumplicidade. Para mim esta visão é recorrente e imutável, nada muda, sempre é o mesmo sorriso plácido do homem, a mesma languidez da mulher, as mesmas dobras dos lençóis e cantos sombrios do quarto, sempre a luz da lâmpada roça os seios e os pômulos dela no mesmo ângulo e sempre o xale de seda e os cabelos escuros caem com igual delicadeza.
Cada vez que penso em ti, assim te vejo, assim nos vejo, detidos para sempre nessa tela, invulneráveis ao deterioro da memória. Posso me recriar longamente nessa cena, até sentir que entro no espaço do quadro e já não sou quem observa, senão o homem que jaz junto a essa mulher. Então se rompe a simétrica quietude da pintura e escuto nossas vozes muito próximas.
- Conte uma história- lhe digo
- Como a queres?
- Conte uma história que não tenhas contado a ninguém.


Vida y Poesía

Carlos Drummond de Andrade




Buscando bien, terminas por encontrar

No la explicación (dudosa) de la vida

Pero sí la poesía (inexplicable) de la vida.






20 jun 2009

Umas e Outras

Chico Buarque



Unas y Otras

Si una nunca tiene uma sonrisa
Es para mejor reservarse
Y dice que espera el paraíso
Y la hora de desahogarse
La vida es hecha de un rosario
Que cuesta tanto terminar
Por eso, a veces, ella para
Y se sienta un poco a llorar
¡Qué dia! Ay, para qué tanta cuenta
Ya perdí la cuenta de tanto rezar



Si la otra no tiene paraíso
No le da mucha importancia a eso
Pues ya forjó su sonrisa
E hizo de la misma profesión
La vida es siempre aquél baile
Donde no se escoge pareja
Por eso a veces se cansa
Y se sienta un poco a llorar
¡Qué día! Ay, qué vida tremenda
Con tanta vereda para caminar


Pero todas las madrugadas
Cuando una ya soñó con Dios
Y la otra, triste novia
Pobrecita, ya se acostó con los suyos
El acaso hace que esas dos
Que la suerte siempre separó
Se crucen en la misma calle
Mirándose con el mismo dolor
¡Qué día! Ay, qué vida larga
Tanta vida para desanimarnos.




19 jun 2009

Eu sei que vou te amar / Soneto da Fidelidade

Tom Jobim / Vinícius de Moraes


En 1972, Maria Creuza, al grabar la letra de Vinicius de Moraes, compuesta en 1959, “Eu sei que vou te amar”, agregó el texto de “Soneto da Fidelidade”. La unión de las dos letras revela cierta homogeneidad significativa, aunque los dos textos tengan aspectos formales diferentes, pues hacen profesión de fe en el amor.

El poeta modernista, situado en la segunda generación, vertiente espiritualista, Vinicius de Moraes, fue uno de los más significativos letristas de la MPB (Música Popular Brasilera). Aún antes de publicar poesía, hacía en 1928 letras de música popular, como “Loura ou Morena”, “Canção da Noite”, en colaboración con los hermanos Tapajós

Cuando se yuxtaponen las letras de “Eu sei que vou te amar” y del “Soneto da Fidelidade”, se nota el sentido de que el “yo-lírico” quiere amar el amor, haya lo que haya en la trayectoria existencial. Los equívocos del sentir, la imposibilidad de alcanzar la plenitud llevan a la convergencia del significado: la declaración de ser fiel al amor.

El compromiso es con el amor en sí mismo, por sobre las personas que puedan despertar ese sentimiento, como se puede observar en el primer verso de “Soneto da Fidelidade” (De todo, a mi amor, seré atento antes).

Las interpretaciones de letra y poesía son diversas, y tienen que ver con lo que cada lector entregue a la lectura. Respecto a esto, Umberto Eco afirma:

“Una obra de arte, forma acabada y cerrada en su perfección de organismo perfectamente calibrado, es también abierta, esto es, pasible de mil interpretaciones diferentes, sin que eso redunde en alteración de su irreproducible singularidad. Cada disfrute es así, una interpretación y una ejecución, pues en cada fruición la obra revive dentro de una perspectiva original”



Sé te voy a amarte

Yo sé que voy a amarte
Por toda mi vida, voy a amarte
En cada despedida voy a amarte
Desesperadamente, yo sé que voy a amarte
Y cada verso mío será
Para decirte que sé que voy a amarte
Por toda mi vida

Yo sé que voy a llorar
A cada ausencia tuya voy a llorar
Pero cada regreso tuyo apagará
Lo que esa ausencia tuya me causó
Yo sé que voy a sufrir
La eterna desventura de vivir
A la espera de vivir al lado tuyo
Por toda mi vida.

Soneto de la Fidelidad

Seré atento antes que todo a mi amor
Y con tal celo, y siempre, y tanto
Que aún frente a mayor encanto
De él se encante más mi pensamiento.
Quiero vivirlo en cada momento libre
y en su honor he de esparcir mi canto
y reír mi risa, y derramar mi llanto
a su pesar, o a su alegría.
Y así cuando más tarde me busque
Quien sabe la muerte,
La angustia de quien vive, la soledad
El fin de quien ama,
Yo pueda decirme del amor (que tuve)
Que no sea inmortal ya que es llama
Pero que sea infinito mientras dure.



18 jun 2009

Alfonsina Y El Mar

Ariel Ramirez / Felix Luna
intérprete: Mercedes Sosa

Alfonsina foi uma poetisa de vida pessoal escandalosa e poesia de vanguarda. Mãe solteira com filho de pai desconhecido enfrenta a sociedade e se estabelece como uma das maiores figuras literárias da época.
Dia 20 de maio de 1935, Alfonsina foi operada de câncer de mama. A mastectomia deixa grandes cicatrizes físicas e emocionais. Sempre sofreu de depressão, paranóia e ataques de nervos, mas agora os sintomas da doença mental recrudescem. Vira uma pessoa reservada e evita as amizades.
Em 1937 suicida-se Horacio Quiroga, e ela lhe dedica um poema de versos comovedores e que pressagiam o seu próprio final:

“Morrer como tu, Horacio, lúcido,
Assim como em teus contos, não está mal;
Um raio a tempo e acabou a feira...
Lá dirão.
Mais apodrece o medo, Horácio, que a morte
Que nas nossas costas vai.
Bebestes bem, que logo sorrias...
Lá dirão."

Em outubro de 1938, viaja a Mar del Plata. Desde aí, envia duas cartas: uma ao seu filho, Alejandro, e um “Poema de Despedida” ao jornal La Nación:

“Dentes de flores, coifa de orvalho,
Mãos de ervas, você, ama-de-leite fina,
Tenha-me prontos os lençóis terrosos
E o edredom de musgos escardeados.

Vou dormir, ama-de-leite minha, deite-me.
Ponha-me uma lâmpada à cabeceira,
Uma constelação, a que você gostar,
Todas são boas, desça-as um pouquinho.

Deixe-me sozinha: ouves romper os brotos.
Nina-te um pé celeste desde cima
E um pássaro te desenha uns compassos

Para que esqueças. Obrigada... Ah, uma encomenda:
Se ele ligar novamente pra mim
Diga-lhe que não insista, que saí.”


À uma da madrugada da terça-feira vinte e cinco, Alfonsina abandonou seu quarto e se dirigiu ao mar. Essa manhã, dois operários descobriram o cadáver na praia. Os biógrafos asseguram que pulou ao mar de um penhasco, mas a lenda diz que se internou lentamente no mar...




Alfonsina e o Mar

Pela suave areia
Que lambe o mar
Sua pequena pegada
Não volta mais
Uma vereda solitária
De pena e silêncio chegou
Até a água profunda
Uma vereda solitária
De penas mudas chegou
Até a espuma.

Sabe Deus que angústias
Acompanhou-te
Que dores velhas
Calou-te a voz
Para te deitar
Ninada pelo canto
Dos caramujos marinhos
A canção que cantam
No fundo escuro do mar
Os caramujos.

Vais-te, Alfonsina
Com tua solidão.
Que poemas novos
Fostes buscar?
Uma voz antiga
De vento e de sal,
Requebra-te a alma
E a está levando
E tu vais, para lá
Como em sonhos
Dormida Alfonsina
Vestida de mar.

Cinco sereiazinhas
Levar-te-ão
Por caminhos de algas
E de corais
E fosforescentes
Cavalos marinhos farão
Uma roda ao teu lado.
E os habitantes
Da água vão brincar
Logo ao teu lado.

Desça-me a lâmpada
Um pouco mais
Deixe-me que durma,
Ama-de-leite, em paz
E se ele ligar
Não lhe diga que estou
Diga-lhe que Alfonsina
Não volta
E se ele ligar
Não lhe diga nunca que estou
Diga-lhe que fui embora

Vais-te, Alfonsina
Com tua solidão.
Que poemas novos
Fostes buscar?
Uma voz antiga
De vento e de sal,
Requebra-te a alma
E a está levando
E tu vais, para lá
Como em sonhos
Dormida Alfonsina
Vestida de mar.


Cuando Ya Me Empiece a Quedar Solo

Charly Garcia



Quando eu comece a ficar sozinho.

Terei os olhos muito longe
E um cigarro na boca,
O peito dentro de um oco,
E uma gata meio louca.

Um cenário vazio,
Um livro morto de pena,
Um desenho destruído
E a caridade alheia.

Uma televisão inútil
Elétrica companhia,
O radio a todo volume
E uma prisão que não é minha

Uma velhice sem temores
E uma vida tranqüila
Janelas muito agitadas
E uma cama tão imóvel.

E um monte de jornais empilhados
E uma flor cuidando do meu passado
E um rumor de vozes que me gritam
E um milhão de mãos que me aplaudem
E o fantasma teu, sobre tudo
Quando já comece a ficar sozinho.


De Mí

Charly Garcia


De mim

Quando estiveres mal
Quando estiveres sozinho
Quando já estejas cansado de chorar
Não te esqueças de mim
Porque sei que posso te estimular.
Quando me vejas nos olhos
E meu olhar esteja em outro lugar
Não te aproximes de mim
Porque sei que posso te machucar.
Não penses que estou louco
É só uma maneira de agir
Não penses que estou só
Estou comunicado com todos os outros.
Por isso quando estiveres mal
Quando estiveres sozinha
Quando já estiveres cansada de chorar
Não te esqueças de mim
Porque sei que te posso estimular.






Inconsciente colectivo

Charly Garcia



Inconsciente Coletivo

Nasce uma flor, todo dia sai o sol
De vez em quando escutas aquela voz
Como de pão, feliz de cantar
Nos telhados de minha mente com as cigarras.
Mas ao mesmo tempo existe um transformador
Que consome o de melhor que tens.
Puxa-te pra trás, te pede mais e mais
E chega a um ponto em que não queres.
Mama a liberdade, sempre a levarás
Dentro do coração.
Pode te corromper
Podes esquecer
Mas ela sempre está.
Mama a liberdade, sempre a levarás
Dentro do coração.
Pode te corromper
Podes esquecer
Mas ela sempre está.

Ontem sonhei com os esfomeados, os loucos,
Os que foram embora, os que estão em prisão
Hoje acordei cantando esta canção
Que já foi escrita há tempos atrás
É necessário cantar de novo
Uma vez mais.




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Yo Vengo Ofrecer Mi Corazón Fito Paez

Fito Paez



Eu venho oferecer meu coraçao

Quem disse que tudo está perdido?
Eu venho oferecer meu coração
Tanto sangue levado pelo rio
Eu venho oferecer meu coração

Não será tão fácil, já sei o que acontece
Não será tão simples como pensava
Como abrir o peito e tirar a alma
Uma facada de amor

Lua dos pobres, sempre aberta,
Eu venho oferecer meu coração
Como um documento inalterável
Eu venho oferecer meu coração.

E unirei as pontas de um mesmo laço
E irei tranqüilo, irei devagar,
E te darei tudo, e me darás algo,
Algo que me alivie um pouco mais.

Quando não haja ninguém perto ou longe,
Eu venho oferecer meu coração.
Quando os satélites não alcancem,
Eu venho oferecer meu coração.

E falo de países e de esperanças.
Falo pela vida, falo por nada
Falo de mudar esta, nossa casa,
De mudá-la só por mudar.

Quem disse que tudo está perdido?
Eu venho oferecer meu coração.


Dar Es Dar

Fito Paez



Dar é Dar

Dar é dar
E não prestar atenção a ela
E à sua forma de agir.
Dar é dar
E não dizer a ninguém
Pra ficar ou fugir.

Quando o mundo te pergunta
Do porquê, porquê, porquê,
Por que gira a roda
Por que não te deténs.
Eu te digo que dar é dar.

Dar é dar
E não marcar as cartas, simplesmente dar
Dar é dar, e não explicar a ninguém,
Não há nada que explicar.
Hoje os tempos vão a mil
E teu estranho coração
Já não capta como antes
As pulsações do amor.
Eu te digo que dar é dar,
Dar e amar.
Olha cara, faça fácil: dar é dar
Dar o que tenho tudo me dá
Dá, dá, dá, dá, dá, dá, dá,
Não conto o troco, sempre é demais
Dá, dá, dá, dá, dá, dá, dá,
Dar é dar,
É sómente uma forma de andar
Dar é dar, o
O que recebes é também liberdade

Quando estou perdido,
Um pouco doido por aí
Sempre há alguém com teus olhos,
Esperando-me até o fim.
Porque dar é dar, dar e amar
Obrigada, menina por tua vida
Mais uma vez
Dar é dar
Dar o que tenho tudo me dá
Dá, dá, dá, dá, dá, dá, dá,
Não conto o troco, sempre é demais
Dá, dá, dá, dá, dá, dá, dá,
Estar de menos ou estar de mais
Dá, dá, dá, dá, dá, dá, dá,
Céu ou inferno, dá no mesmo
Dá, dá, dá, dá, dá, dá, dá,
Dar é dar, dar é dar
É encontrar em alguém
O que nunca encontrarás.
Dar é dar... Obrigado!


15 jun 2009

Cálice

Composición: Chico Buarque e Gilberto Gil

Este es un ejemplo de letra contra censura, predominante entre los compositores brasileros en la época (1973) en que la canción fue creada. En realidad, “Cálice” se destinaba a un gran evento que reuniría en parejas a los mayores nombres del sello discográfico Polygram. En el libro “Todas as Letras” Gil narra en detalles la historia de la canción, comenzando por en encuentro inicial de los dos, en el departamento de Chico, ocasión en que le mostró los versos que hiciera en el día anterior, un viernes santo. Se trataba del refrán (Padre, aparta de mi este cáliz / de vino tinto de sangre) y fue inmediatamente percibido por Chico. Gil le llevó todavía la primera estrofa, recordando la “bebida amarga”, una bebida italiana llamada Fernet, que el dueño de casa apreciaba y que siempre le ofrecía, mientras que “el silencio en la ciudad no se escucha” significaba que “en el ruido de la ciudad no es posible escuchar el silencio”, o sea, metafóricamente, “no hay censura, la censura es una quimera”, pues “aún callada la boca, queda el pecho, queda la cabeza”. De este y de otro encuentro, dias después, salieron la melodía y las demás estrofas, cuatro en total, siendo la primera y la tercera de Gil, y la segunda y la cuarta, de Chico.
El día del show, cuando los dos comenzaron a cantar “Cálice”, desconectaron el micrófono. “Tengo la impresión de que ya había sido presentada a la censura, habiéndonos recomendado no cantarla. Pero hicimos desobediencia civil y quisimos cantarla” concluyó Gil.
Irritadísimo con el micrófono desconectado, Chico intentaba con otro micrófono que en seguida era “callado”, y así en una escena tragicómica, fueron siendo “amordazados”, impidiendo cantar “Cálice” hasta el fin. Liberada cinco años después, la canción fue incluida en el disco anual de Chico, con él declarando que aquél no era el tipo de música que componía en la época, pero que tenía que ser registrada, pues su tardía liberación (junto con A pesar de Usted y Tanto Mar) no valía el prejuicio de la prohibición. En la grabación, las estrofas de Gilberto Gil, son interpretadas por Milton Nascimento, haciendo el coro com MPB-4, en un arreglo dramático.

Jairo Severiano e Zuza Homem de Mello
Livro: 85 anos da Música Brasileira Vol. 2, 1ª edição, 1997, editora 34.





Cáliz


¡Padre! Aparta de mí ese cáliz
¡Padre! Aparta de mí ese cáliz
¡Padre! Aparta de mí ese cáliz
De vino tinto de sangre.

Como beber
De esa bebida amarga
Tragar el dolor
Engullir la lucha
Aún callada la boca
Queda el pecho.
Silencio en la ciudad
No es escucha.
De qué me vale
Ser hijo de la santa
Mejor sería
Ser hijo de la otra.
Otra realidad
Menos muerta
Tanta mentira
Tanta fuerza bruta.

¡Padre! Aparta de mí ese cáliz
¡Padre! Aparta de mí ese cáliz
¡Padre! Aparta de mí ese cáliz
De vino tinto de sangre.

Qué difícil es
Despertar callado.
Si en el silencio de la noche
Me fastidio
Quiero lanzar
Un grito deshumano
Que es una manera
De ser escuchado
Todo este silencio
Me aturde
Y aturdido
Permanezco atento
En las tribunas
A cualquier momento
Ver emerger
Al monstruo de la laguna…

¡Padre! Aparta de mí ese cáliz
¡Padre! Aparta de mí ese cáliz
¡Padre! Aparta de mí ese cáliz
De vino tinto de sangre.

De muy gorda
La chancha ya no camina.
De muy usado
El cuchillo ya no corta
Como es difícil, padre
Abrir la puerta
Esa palabra
Presa en la garganta
Esa tremenda borrachera
Del mundo
De qué me sirve
Tener buena voluntad
Aún callado el pecho
Queda la mente
De los borrachos
Del centro de la ciudad

¡Padre! Aparta de mí ese cáliz
¡Padre! Aparta de mí ese cáliz
¡Padre! Aparta de mí ese cáliz
De vino tinto de sangre.

Tal vez el mundo
No sea pequeño.
Ni sea la vida
Un hecho consumado.
Quiero inventar
Mi propio pecado
Quiero morir
De mi propio veneno
Quiero perder de una vez
Tu cabeza
Mi cabeza
Perder tu juicio
Quiero oler humo
De diesel
Embriagarme
Hasta que alguien me olvide


Nota: No es casual el uso de la palabra "Caliz". En português hay dos palabras con la misma pronunciación: "cálice" y "cale-se" ("cáliz" y "cállate" respectivamente).


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y de yapa... el video del show censurado.



13 jun 2009

Lígia

El 16 de noviembre de 2000, en la revista Marie Claire se publicó la historia de la música Lígia, de Tom Jobim.

Lígia:

“Los ojos verdes de la carioca Lygia Marina de Moraes son morenos em la letra de Lígia. Un “disfraz” de la identidad de la musa y de la atracción de Tom Jobim por ella. Tom y Lygia, profesora de pré-escolar de una de las hijas del compositor, se conocieron en 1968, en el bar Veloso, en Ipanema. Nunca hubo nada entre los dos, pero aquel encuentro originaría el samba grabado por Chico Buarque en el disco “Sinal Fechado”, en 1974. “Tom vivia pensando en ella” dice el periodista Ruy Castro que registró el episodio en el libro “Ela é Carioca” (Cia das Letras)

Durante muchos años, Tom negó que Lygia fuera su musa, en respeto al amigo Fernando Sabino, marido de ella en esa época.
Sólo en 1994, cuando la pareja se separó, Tom admitió la inspiración a los amigos. Hoy, con 54 años, Lygia vive sola y dirige el departamento cultural de la Asamblea Legislativa de Rio de Janeiro. Ella recuerda con orgullo los detalles de su relación jamás consumada con Tom Jobim.
Lygia Marina de Moraes: “Conocí a Tom en una tarde lluviosa. El bar Veloso estaba vacío, era junio y hacía frío. Yo y una amiga, Cecília, nos sentamos en el hall y vimos a Tom conversando con Paulo Góes (fotógrafo). Los dos terminaron sentándose en nuestra mesa. Cuando conté a Tom que era profesora de su hija Beth, tuvo un ataque de risa y dijo: “Es la primera vez que un flirteo se convierte en reunión de padres y maestros!”. Y yo toda orgullosa: imagínate, en el 68, Tom era uno de los hombres más lindos de Brasil.

Él tenía que dar una entrevista a Clarice Lispector para la “Manchete” y nos invitó a mí y a Cecilia para ir con él. Fuimos en el autito celeste de Tom. Yo usaba una falda de lana y un suéter de cachemira. Al abrir la puerta, Clarice puso cara de mal-humor. Tom abrazado a mí y a Cecília le dijo: “me traje a mis amigas”. Ella quedó aún más furiosa cuando pidió a Tom que hiciera un poema para ella, como Vinicius [de Moraes] hiciera en entrevista anterior y él dijo: “no soy poeta, si tuviera una guitarra…”
Pero entonces agarró un block de papel y escribió un poema para mí, que guardo hasta hoy: “tus ojos verdes son mayores que el mar / si un día yo fuera tan fuerte como tú / yo te despreciaría y viviría en el espacio / O tal vez entonces yo te amaría / ah, que nostalgias tengo / de la vida que nunca tuve.” Y firmó: A.C.J.

Saliendo de allí, Tom me llevó a su casa. Nos despedimos en el auto, con un beso en el rostro. Me puse muy nerviosa pero paró ahí. Tom era casado… Aquel aventón fue nuestro único encuentro a solas. La música habla de todo lo que no ocurrió: el cine, el paseo por la playa... Después nos encontramos muchas veces, pero siempre en grupo. Tiempo después me casé con el cineasta Fernando Amaral y entré al grupo. Viví el auge de Ipanema.

Después de cuatro años de casada, y con un hijo, me separé. Después me casé con el escritor Fernando Sabino. En 1973, creo que Tom no sabía que yo estaba casada con él, y llamó por teléfono a Fernando pidiendo mi teléfono. Mi marido le hizo un chiste: le dio un número equivocado. En seguida llamó al teléfono que le había dado y avisó: “Tom va a llamar buscando una Lígia, pero el teléfono es este” (y dio otro número equivocado). Los amigos quedaron sabiendo de esta historia, incluso Tom. Tal vez de ahí haya surgido la frase en la música que habla del teléfono equivocado.

Estaba sola en casa cuando oí en la radio Chico cantando Lígia por primera vez. Fui corriendo comprar el disco. Enseguida me encontré en la letra. Ser homenageada es maravilloso, más aún por Tom, con una música linda y sofisticada… Es una gloria. Claro que la música rindió comentarios y Fernando quedó hecho una fiera. Durante los 19 años en que estuve casada, Tom evitó el tema. Estuvimos juntos en varios lugares, tipo fin de año en casa de Jorge Amado, yo con Fernando y Tom con Ana, su segunda mujer. Pero nadie tocaba el asunto.

Un día, Tom me encontró por casualidad en la Cobal y me dijo: “Está llegando mi musa”. Fue la primera vez que lo admitió conmigo. Hasta hoy, en cada bar que entro tocan Lígia. Hace parte de mi show. Me hice inmortal. Tengo casi todas las grabaciones de Lígia. Existe hasta una versión de Joao Gilberto en que, al contrario de la oficial, el romance ocurre y Tom hasta se casa conmigo. Las personas me cobran el hecho de nunca haber ocurrido nada entra nosotros. Pero no habrá sido mejor que haya quedado en la fantasía? Tal vez debería haber sido esa la historia: hacerme musa, entrar en un restaurant y acordarme de Tom lleno de encanto”.



Ligia
Tom Jobim / Chico Buarque

Yo nunca soñé contigo
Nunca fui al cine
No me gusta el samba, no voy a Ipanema
No me gusta la lluvia ni el sol

Cuando te llamé, descolgué, fue equivocado
Tu nombre no sé
Olvidé al piano las tonterías de amor
Que iba a decirte, no… Lígia, Lígia.

Nunca quise tenerte a mi lado
Un fin de semana
Una cerveza helada en Copacabana
Caminar por la playa hasta el Leblón

Cuando me enamoré
No fue más que ilusión, tu nombre rasgué
Hice un samba de las mentiras de amor
Que aprendí contigo
Sí… Lígia, Lígia…

*Te aproximas a mí
Con esas maneras extrañas y yo digo que sí
Pero tus ojos castaños
Me meten más miedo que un día de sol
Sí… Lígia, Lígia.

**Y cuando me envuelves
En tus brazos serenos yo voy a rendirme
Pero tus ojos morenos
Me meten más miedo que un rayo de sol
Sí… Lígia, Lígia.


*1ª versión
**2ª versión


El Breve Espacio en que no estás

Pablo Milanés  
Ainda restam restos de umidade,  
Seus aromas preenchem já minha solidão,  
Na cama tua silhueta  
Desenha-se qual promessa  
De cobrir o breve espaço em que não estás.  
Ainda não sei se voltará,  
Ninguém sabe ao dia seguinte o que fará,  
Rompe todos meus esquemas  
Não confessa nem uma pena
Não me pede nada em troca do que dá.  
Costuma ser violenta e meiga
Não fala de uniões eternas,
as se entrega como se houvesse  
Só um dia para amar  
Não comparte uma reunião  
Mas gosta da canção  
Que compromete seu pensar.  
Ainda não perguntei: ficarás,  
Temo muito a resposta de um “jamais”,
Prefiro-a compartida  
Antes que esvaziar a minha vida  
Não é perfeita, 
mas se aproxima ao que eu  
Simplesmente sonhei.



Por Quien Merece Amor

Silvio Rodriguez


Por Quem Merece Amor


Incomoda-te meu amor?
Meu amor de juventude,
E meu amor é uma arte
Em virtude.

Incomoda-te meu amor?
Meu amor sem máscara,
E meu amor é uma arte
De paz.

Meu amor é minha prenda encantada,
Minha extensa moradia
É meu espaço sem fim.
Meu amor não precisa fronteiras
Como a primavera
Não prefere jardim.

Meu amor não é amor de mercado,
Porque um amor sangrado
Não é amor de lucrar
Meu amor é tudo quanto eu tenho,
Se o nego ou o vendo,
Para que respirar?

Incomoda-te meu amor?
Meu amor de humanidade
E meu amor é uma arte
Em sua idade

Incomoda-te meu amor?
Meu amor de fonte de água
E meu amor é uma arte
Maior.

Meu amor não é amor de só um,
Senão alma de tudo
O que urge sarar.
Meu amor é um amor de baixo
Que o devir me trouxe
Para fazê-lo empinar.

Meu amor, o mais apaixonado,
É o mais esquecido
Em sua antiga dor.
Meu amor
Abre o peito à morte
E despenha sua sorte
Por um tempo melhor.
Meu amor, este amor com garra
É um sol aceso
Por quem merece amor.


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Com MPB4, versao em português



Com Silvio Rodriguez


Playa Girón

É um símbolo para todos os povos oprimidos.
Praia Girón é a primeira derrota do imperalismo em América Latina, mas também é uma das primeiras derrotas do imperialismo a escala mundial




Praia Girón é uma pequena praia na margem oriental da “Bahía de Cochinos”, ao centro sul de Cuba, que hoje é um centro turístico. Localizada em um dos maiores pantanais do mundo, a “Ciénaga de Zapata” passou a formar parte da história em 1961, quando foi escolhida como um dos pontos de desembarque para a invasão da “Bahia de Cochinos”.
A invasão de 1500 exilados cubanos, patrocinados pelo governo dos Estados Unidos, foi derrotada pelas forças do governo de Fidel Castro. Ao longo de 72 horas, houveram combates em numerosos lugares da “Ciénaga de Zapata”, sendo Praia Girón o último ponto ocupado pelos invasores. Hoje existe lá um museu que recolhe os detalhes daquele fato histórico.

Silvio Rodriguez



Praia Girón


Companheiros poetas,
Tomando em consideração os últimos acontecimentos
Na poesia, queria perguntar
Sinto urgência
Que tipo de adjetivos deve-se usar
Para fazer o poema de um barco
Sem que se torne sentimental, fora da vanguarda
Ou evidente panfleto,
Se devo usar palavras
Tipo Frota Cubana de Pesca e
Praia Girón?

Companheiros de música,
Tomando em consideração essas multi-tons
E audazes canções, queria perguntar
Sinto urgência
Que tipo de harmonia deve-se usar
Para fazer a canção deste barco
Com homens de pouca infância, homens e somente
Homens de convés.
Homens negros e vermelhos e azuis,
Os homens que habitam o Praia Girón?

Companheiros de história,
Tomando em consideração o implacável
Que deve ser a verdade, queria perguntar
Sinto tanta urgência
O que deveria dizer? Que fronteiras eu devo respeitar?
Se alguém rouba comida
E depois da a sua vida. O que fazer?
Até onde devemos praticar as verdades?
Até onde sabemos?
Que escrevam, pois, a história, sua história,
Os homens do “Praia Girón”


Óleo de Una Mujer con Sombrero

Silvio Rodriguez



Óleo de uma Mulher com Chapéu

Uma mulher se perdeu
Conhecer o delírio e o pó,
Perdeu-se esta bela loucura,
Sua breve cintura debaixo de mim
Perdeu-se minha forma de amar,
Perdeu-se meu rastro no seu mar.

Vejo uma luz que vacila
E promete nos deixar a escuras.
Vejo um cão latindo pra lua
Com outra figura que me lembra a ti
Vejo mais: vejo que não me encontrou
Vejo mais: vejo que se perdeu.

Uma mulher inominável
Foge como uma gaivota
E eu rápido seco minhas botas
Blasfemo uma nota e apago o relógio.
Que não me importe o amor
Que posso lhe cantar sua música.

A covardia é assunto
Dos homens, não dos amantes.
Os amores covardes não chegam a amores,
Nem a histórias, ficam aí
Nem a lembrança os pode salvar,
Nem o melhor orador conjugar.

Uma mulher com chapéu,
Como um quadro do velho Chagall,
Corrompendo-se ao centro do medo
E eu, que não sou bom, comecei a chorar.
Mas então chorava por mim,
E agora choro por vê-la morrer.





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12 jun 2009

La Llorona

A chorona é uma personagem lendária originária do México, muito conhecida também em outros países da América Hispânica. Trata-se de uma mulher que perde seus filhos e, convertida em alma penada, os procura em vão, turbando com seu pranto os que a ouvem. Mesmo que existam muitas versões da estória, os fatos principais são sempre os mesmos.

O Mito:

Uma bela camponesa mexicana se transforma na querida de um nobre espanhol, Don Nuño de Montes, um cavalheiro de ilustre berço. Mas acontece uma coisa muito básica. O hispânico, numa atitude “mui varonil”, se compromete com uma dama de posição e rejeita Luiza, que tinha três filhos de seu amante. A mulher desespera, já que amava profundamente Don Nuño, e num rapto de loucura assassina as três crianças. Mas reage tardiamente e corre pelas ruas de Cidade de México chorando sua desventura. Só nesse momento Don Nuño percebe sua brutal reação e por sua vez, desesperado frente à morte de seus filhos, se suicida.
O juízo a Luiza é muito rápido e ela é executada no mesmo dia em que se enterrava Don Nuño. O fantasma de Luiza é chamado de “A chorona”, já que se apresenta como uma sombra queixosa que chora desconsolada.

La Llorona
Lila Downs
Composição: Luis Martz

Cantado por Lila Downs, uma das mais impactantes vozes que eu já escutei...




A chorona

Dizem, que não guardo luto, chorona
Porque não me vêem chorar
Dizem, que não guardo luto, chorona
Porque não me vêem chorar

Há mortos que não fazem barulho, chorona
E é maior o seu penar
Há mortos que não fazem barulho, chorona
E é maior o seu penar

Ai de mim, chorona
Chorona me leva ao rio
Ai de mim, chorona
Chorona me leva ao rio

Cobre-me com teu manto, chorona
Porque morro de frio
Cobre-me com teu manto, chorona
Porque morro de frio

Saías do templo um dia, chorona
Quando ao passar eu te vi
Saías do templo um dia, chorona
Quando ao passar eu te vi

Um belo vestido usavas chorona
Que a Nossa Senhora eu pensei que eras
Um belo vestido usavas chorona
Que a Nossa Senhora eu pensei que eras

Ai de mim, ai de mim chorona
Chorona de azul do céu.
Ai de mim, ai de mim chorona
Chorona de azul do céu.

E nem que me custe a vida, chorona
Não deixarei de te amar
E nem que me custe a vida, chorona
Não deixarei de te amar